Cómo ser productivos cuando tenemos poca energía.

             Hay días en los que nos sentimos muy bien y llenos de energía,  logramos muchas cosas, y aun así no nos sentimos demasiado cansados. Otros días empezamos cansados y sin energía, el día nos parece eterno, y no avanzamos mucho.

            Los pendientes, proyectos, y tareas se tienen que terminar independientemente de cómo nos sintamos. Vamos a ver algunas maneras de ser más productivos en esos días que hubiéramos preferido quedarnos a descansar en casa.

Movernos físicamente

            Esto nos ayuda a despabilar la mente y sentirnos más despiertos.

            Si hay temas de trabajo que ver con uno o varios compañeros podemos ir a su espacio de trabajo en lugar de llamarles. Esto tiene el beneficio adicional que el platicar nos mantiene más despiertos.

            Levantarnos de nuestro lugar y caminar varias veces durante el día. Ir por un vaso de agua tiene el beneficio de mantenernos hidratados, lo cual reduce el cansancio. Exponernos a luz solar, si es posible, disminuye la producción de la melatonina lo cual nos ayuda a sentirnos despiertos.

              Incluso simplemente el estirarnos en nuestro escritorio ayuda.

Evitar distracciones

            Cuando estamos cansados es mucho más difícil concentrarnos. Si además continuamente estamos siendo interrumpidos por mensajes instantáneos, correos electrónicos, llamadas, y otras distracciones simplemente es imposible mantenernos enfocados.

            Guardar nuestro teléfono en modo silencio, y configurar nuestra cuenta de correo electrónico para que se actualice una vez cada hora ayuda a que tengamos periodos sin tantas interrupciones. Incluso podemos programar breves descansos que coincidan con la recepción de correo electrónico para revisar nuestro teléfono y otros pendientes.

            Usar audífonos ayuda a que nuestros compañeros nos interrumpan menos. Si además es música que nos gusta y nos anima, los resultados son aún mejores.

            Si tenemos que hacer algo que requiera estar concentrados mucho tiempo hay que dividirlo en varios periodos de tiempo más corto. Por ejemplo, si necesitamos concentrarnos por dos horas, lo podemos dividir en 6 sesiones de 20 minutos. Nos concentramos por 20 minutos exclusivamente en esto, luego intercalamos actividades que no requieran mucha concentración o descansos antes de seguir con la siguiente sesión. Más adelante vamos a ver algunas posibles actividades que no requieren mucha concentración y energía.

Comer para mejorar energía

            Lo más práctico es consumir cafeína y azúcar para contrarrestar el efecto del cansancio, pero ambos tienen efectos negativos. La cafeína nos mantiene alerta por un tiempo, pero el efecto es temporal. Además, mucha cafeína especialmente en la tarde o noche dificulta el dormir. El azúcar tiene un efecto energizante más corto , y en grandes cantidades causa sobrepeso.

            Como lo comentamos antes, tomar agua varias veces durante el día nos ayuda a no sentirnos cansados. También podemos consumir nueces, almendras, o cacahuates en pequeñas cantidades para incrementar nuestra energía. Siendo que tienen muchas calorías las porciones tienen que ser pequeñas, y no debemos de consumirlas más que una vez o dos durante el día de trabajo.

Priorizar

            Todos los días es importante enfocarnos en las prioridades, pero es esencial cuando nuestra energía no nos alcanza. Debemos de tener bien claro cuáles son las dos o tres actividades más importantes en el día. Aquellas que si las terminamos nos podemos sentir a gusto de que fue un día productivo.

            Empezar con estas actividades y tratar de terminarlas una tras otra va a ser muy difícil ya que estamos cansados. Ya comentamos que hay que dividirlas en varias sesiones intercaladas con descansos y otras actividades que requieran menos energía.

            Esas tareas que ordinariamente dejamos para después porque son tediosas o aburridas, son perfectas para este tipo de días. Es difícil trabajar en proyectos que requieran que estemos concentrados por mucho tiempo, pero con trabajos sencillos y repetitivos es más fácil. Además, así las vamos quitando de nuestros pendientes.  

            La siguiente lista no es exhaustiva, pero da una idea de cómo pudiera ser.

  • Leer un artículo sobre temas relacionadas con nuestro trabajo.
  • Leer informes pendientes.
  • Llenar informes pendientes.
  • Hacer llamadas telefónicas pendientes.
  • Limpiar y organizar nuestro espacio de trabajo.
  • Organizar y programar el día o semana siguientes.
  • Limpiar la bandeja de entrada del correo electrónico.
  • Tener una reunión o junta.

          Lo principal es reconocer que cuando nuestra energía esta baja no rendimos igual. Esto no significa que no podamos ser productivos, pero que tenemos que adoptar estrategias diferentes para lograrlo.